En el Día Mundial del Braille se celebra la contribución de Louis Braille al mundo de la accesibilidad web para las personas con discapacidad visual. Es un buen momento para reflexionar sobre el impacto que ha tenido este sistema de lectoescritura táctil sobre la vida de millones de personas ciegas en todo el mundo. Esperamos que el día de hoy sirva como una llamada a la acción para recordar a la sociedad, la importancia de proporcionar las herramientas necesarias para que las personas con discapacidad visual puedan participar plenamente de forma independiente en la vida cotidiana.
La vida de Louis Braille
Louis Braille nació el 4 de enero de 1809 en Francia. A la edad de tres años, un trágico accidente con un punzón en el taller de su padre tuvo como consecuencia la pérdida de la vista. Este revés, lejos de disminuir su determinación, le impulsó a encontrar una manera revolucionaria de permitir que las personas ciegas pudieran leer y escribir de manera independiente.
A lo largo de su juventud, Louis afrontó numerosos desafíos en su búsqueda por mejorar la accesibilidad para la comunidad ciega. Su dedicación a superar las limitaciones impuestas por su propia discapacidad lo llevó a desarrollar el sistema Braille a la edad de quince años. Este sistema, basado en la combinación de puntos en relieve en celuloide, se convirtió en una herramienta esencial para las personas ciegas.
A pesar de la resistencia inicial a su sistema por parte de las autoridades educativas de la época, Braille trabajó incansablemente para perfeccionar y promover su creación. Su legado perdura no solo en el sistema de lectoescritura táctil que lleva su nombre, sino también en su influencia duradera en la mejora de la calidad de vida de las personas ciegas en todo el mundo. Louis Braille falleció en 1852.
El desarrollo del sistema Braille
El proceso de creación del sistema Braille comenzó con la adaptación de un sistema militar nocturno de lectura táctil conocido como ‘sonografía’, que consiste en una celda de 12 puntos elevada, de dos columnas de seis puntos. Braille simplificó y mejoró este sistema, reduciendo el número de puntos a seis, dispuestos en dos columnas de tres puntos cada una.
Este código permitió la representación de todas las letras del alfabeto, números y signos de puntuación. La disposición de los puntos en relieve permite que las yemas de los dedos identifiquen fácilmente los caracteres, permitiendo a las personas ciegas leer y escribir de manera rápida y precisa.
Impacto del Braille en la comunidad con discapacidad visual
Acceso a la educación y la cultura
El acceso a la educación para las personas ciegas ha experimentado una transformación significativa gracias al sistema Braille. Desde su introducción en el siglo XIX, este método de lectoescritura táctil ha abierto puertas para la comunidad con discapacidad visual, permitiendo un acceso más equitativo a la educación, ya que proporciona una herramienta efectiva para aprender a leer y escribir, participar en clases y acceder a materiales educativos.
Del mismo modo, el acceso a novelas, poesía, ensayos y obras teatrales en Braille han proporcionado la oportunidad de disfrutar de una amplia variedad de géneros y estilos literarios, permitiéndoles explorar la diversidad cultural a través de la palabra escrita siendo incluidos en la cultura de su comunidad.
Desarrollo personal y profesional
A nivel personal y en el entorno laboral, el Braille ha empoderado a las personas con discapacidad visual ofreciendo no solo más oportunidades laborales y no laborales y brindándoles mayor autonomía en las actividades diarias, sino que también ha contribuido a cambiar percepciones y estereotipos de la sociedad.
Avances tecnológicos y el Braille
Con la llegada de los ordenadores se inventaron numerosos dispositivos basados en el Braille. Destacan algunos como el antiguo Optacon (Optical to Tactile Converter, un dispositivo capaz de convertir a Braille textos impresos mediante una cámara) o el Braille’n Speak (un anotador parlante que permitía editar archivos de texto utilizando un teclado braille y almacenarlos en un ordenador o en Disquetes 3.5). Quedaron en desuso, pero fueron bastante utilizados en su momento y dieron pie a invenciones actuales como el Braibook, un lector de libros electrónicos que utiliza una celda Braille.
Otro dispositivo interesante que aún se utiliza en la actualidad es la línea o pantalla Braille. Su función es convertir el texto que aparece en pantalla en caracteres Braille. Las primeras ocupaban muchísimo espacio y se conectaban a la tarjeta gráfica del ordenador, como si de un monitor se tratase. Actualmente son más pequeñas y es posible utilizarlas mediante tecnología Bluetooth o conexiones USB, lo que permite utilizarlas, además de con ordenadores, con teléfonos móviles o tablets.
Las líneas Braille utilizan un tipo de Braille especial: El Braille computerizado, un sistema Braille que añade dos puntos más al signo generador (⣿). Estos dos puntos permiten prescindir de los símbolos adicionales que representan los estados específicos de las letras. (⠨⠁ (A) pasa a ser ⡁, por ejemplo).
Desafíos actuales y futuros
El principal problema del Braille es su tamaño, ya que ocupa demasiado espacio. Para hacerse una idea, una página de un libro en tinta ocupa cuatro hojas en sistema Braille. Debido a esto, se está dejando de utilizar cada vez más como método de lectura en pro de dispositivos electrónicos.
Las líneas o pantallas Braille palían el problema en cierta medida, pero tienen dos inconvenientes: por un lado no son accesibles para todo el mundo debido a su elevado precio, y por otro son dispositivos que se dañan con relativa facilidad debido a su construcción.
También falta concienciación sobre el uso de este sistema de lectoescritura. Por ley los medicamentos deben ir etiquetados en Braille, pero no ocurre lo mismo con el resto de productos, y queda a decisión de las distintas marcas etiquetarlos en Braille o no.
Braille en diseño gráfico
La demanda de incorporar el Braille en la lectura cotidiana, junto con el deseo de superar la división y segmentación por grupos, ha llevado a que diversas personas desarrollen tipografías que integren ambos conjuntos de caracteres simultáneamente. Entre estas personas encontramos al japonés Kosuke Takahashi quien, con tan solo 24 años, diseñó ‘Braille Neue’, la tipografía que permite ser leída tanto por invidentes como por personas que no lo son.
Él mismo cuenta que la tipografía es universal y trata de unificar los caracteres visibles y el Braille de forma que se crea un texto accesible para todos por igual.
Simultáneamente, y como fuente de inspiración para Takahashi, encontramos a la diseñadora española Nuria López también conocida en el mundo de diseño gráfico como “Srta Serifa”. Ella diseñó, del mismo modo, una tipografía que combina el braille y el texto latino para unificarlo y representarlo como una única fuente.
Muestra de ‘Blind Words’ – Fuente: Behance.net
Muestra de ‘Blind Words’ – Fuente: Behance.net
Melanie Caballero,
Consultores de Accesibilidad de MTP