Una de las buenas prácticas, dentro de las medidas de higiene y seguridad para minimizar los riesgos de contagio de covid, es la distancia social que, en el terreno laboral, se traduce en muchos casos en el teletrabajo.
Además de como medida de precaución, el teletrabajo también implica otros beneficios y ventajas, tanto desde el punto de vista ambiental como para la conciliación del trabajo con la vida familiar.
Incremento del teletrabajo
La pandemia ha ocasionado un incremento muy notable del teletrabajo. En 2019, según datos de la Encuesta de Población Activa, un escaso 4,8% de las personas ocupadas trabajaban de forma habitual desde su domicilio más de la mitad de los días, y ocasionalmente, otro 3,5%. Estos porcentajes suponían ligeros incrementos con respecto a años anteriores, y estaban muy por debajo de la media europea.
Sin embargo, con el confinamiento total en la primavera pasada, y en los meses posteriores, el teletrabajo se ha convertido en algo habitual en muchas empresas –como MTP-, a la espera de una mejora de la situación sanitaria.
Un estudio del Banco de España realizado el pasado año con un muestreo entre empresas, ponía de manifiesto que el 80% de las consultadas había recurrido al teletrabajo para mantener su actividad normal. En este mismo informe se estima que más del 30% de los puestos son susceptibles de ser desempeñados bajo esta modalidad.
Impacto positivo
Tras estas cifras, nos centramos en este post en ventajas e impacto positivo del teletrabajo. Al reducirse la movilidad con una menor cifra de desplazamientos, se producen menos consumos y residuos en las oficinas, y todo ello implica menos contaminación de forma directa. La contaminación también disminuye por el menor número de vehículos en movimiento.
Pero, ¿qué pasa en el lugar en el que trabajamos?, que es nuestro hogar, principalmente… Para lograr ahorro y consecuencias beneficiosas para nuestra economía y el medio es bueno tener en cuenta una serie de buenas prácticas para reducir la huella de carbono y la contaminación, complementarias a las que ya aplicamos en nuestros hogares.
Incluimos a continuación unos consejos que nos pueden ayudar para este objetivo.
- Habilita el espacio de trabajo para aprovechar la luz natural en la medida de lo posible, y con utilización de la iluminación artificial con lámparas de bajo consumo.
- No consumir envases de plásticos. Si estamos en casa, ¿qué necesidad tenemos, si además fregamos nosotros o el lavavajillas?… El plástico es más perjudicial que la energía y el agua consumida.
- Ya no te desplazas a la oficina, y tampoco tienes que ir en coche a todos los sitios… Utiliza transportes de baja o nula contaminación. Todos sabemos cuáles son.
- Ni la calefacción ni el aire acondicionado tienen que estar mal regulados en el hogar. No hay razón para ello, no solo por el derroche energético, sino por tu bienestar y el de los tuyos. Bienestar y consumo responsable son perfectamente compatibles en el hogar. Nunca es bueno trabajar con calor en invierno, ni con frío en verano
- Y, ¿por qué no cambiamos nuestros contratos de suministros por aquellos que procedan de fuentes renovables? En el caso de la energía eléctrica es bien fácil, y además seguro que se agradece un ahorro económico ahora que puede que tu factura, al estar más horas en casa, haya subido.
- Por supuesto, sigue separando para favorecer el reciclado. Son tus contenedores y te representan a ti y a tu familia.
- Videoconferencias implica utilizar también nuevas tecnologías que no necesitan de papel. Acostúmbrate y acostumbra a tu alrededor. Y si tienes que utilizar el papel, seguro que puedes reutilizar mucho del que tienes almacenado en casa para nada. Y reciclarlo después…
- El cartón y envases, por el incremento de pedidos online, tiene que dejar de ser un problema. El cartón al azul, y el plástico, separado, al amarillo, ¿no? Llévalo todos los días a los contenedores de la calle y date un paseíto agradable, solo, con tu burbuja o con tu perro. Como quieras. Pero te lo mereces después de todo el día trabajando en casa.
- Además teletrabajar no significa tener siempre todos los dispositivos conectados ni en stand by. Tus facturas te lo agradecerán y harás más caso a otras partes importantes de tu vida.
Antonio García
Director de Gobierno y Calidad de MTP